Jamás has sentido como la esperanza se desvanece?... intentas de alguna manera imaginar que todo saldrá bien, pero los obstáculos que se interponen entre tú y lo que deseas son cada vez mas grandes… No pretendo un Si como respuesta a mi larga lista de deseos absurdos, solamente deseo que por una única vez, hagas la vista a quien siempre te ha esperado con los brazos abiertos, siempre ha esperado tu regreso… Hace dos años ya que partiste, y en mi mente solo está el recuerdo de tu imagen bañada en alegría, sonriendo porque cada momento que juntos pasamos han sido los más felices de nuestra existencia. Quisiera que las palabras salieran de mi boca con tal facilidad para poder decírtelas al oído, pero no es así, te las escribo con la esperanza de que algún día las llegases a escuchar…
Puede parecer que hago un último intento por recuperar lo que contigo se fue, Mi felicidad, pero sabes algo?... Mi felicidad es la tuya, pues quien ama de verdad desea con sinceridad la alegría del otro… No te lo niego, después de tanto tiempo aún anhelo recuperar los detalles que perdí con el pasar de los días, la calidez de mis palabras, la sinceridad con la que las decía, ese deseo de sentirte cerca así fuese solo en mis pensamientos… Por tanto amarte me olvidé de ti.
Hemos pasado por todo, reído con aquello que nos causaba gracia, llorado con la esperanza de que todo mejorará, alguna vez imaginamos un futuro juntos… viejitos… aguardando el momento en que solo la muerte nos separaría, pero seguros de que aún en la eternidad estaríamos el uno para el otro, pues aquí y en donde sea seremos inseparables.
Hice la promesa de jamás dejarte sola, que en mí encontrarías la fortaleza que buscabas en momentos de dificultad, prometí estar para ti, no solo para ayudarte cuando caigas, sino para jamás dejarte caer…
Traté de cumplirlo, traté de que no fueran palabras sin sentido que se dicen por el furor del momento, traté de encontrar el motivo por el cual navegar por corrientes que se me presentaban turbias, mi motivo lo encontré, mi razón fuiste tú. Batallé con seres que quizás no conoces, peleé con enemigos que se interponían entre tu felicidad y la mía, fue difícil, pues disponía solo de un escudo y una espada para vencerlos, eran demasiados, pero el escudo de mi corazón, que se veía protegido por una coraza de ilusiones, reforzada con el anhelo de que cuando todo terminara estaría a tu lado, fueron razones suficientes para no dejarme derrotar, mi corazón junto al tuyo estaban seguros…
No podía simplemente defenderme, debía derrotarlos, eran fuertes, parecían obeliscos que no se inmutaban ante el roce de mi espada, pero fue en ese preciso momento, en el que la esperanza muere y las ganas de continuar desfallecen, que decidí hacer mi último esfuerzo, dejar la vida en los campos donde la batalla hacía lugar, y quizás el terreno que jamas, ningún hombre en toda su vida volvería a pisar… Desenvainé mi espada, el resonar de ésta, al roce de su funda, despidió una luz que cegó a los grandes obeliscos, por primera vez en mucho tiempo, tenía la esperanza de ganar, entonces cerré los ojos, empuñé mi espada, y corrí decidido a dejarlo todo por ti aquel día… La batalla al fin terminó, salí victorioso, pero aún quedan secuelas de aquel momento, mi coraza fue totalmente destruida, nuestros corazones quedaron expuestos al devenir del destino, que en un principio se mostró noble y prometía grandes cosas para nosotros, pero no fue así… nuestros corazones, desde ese día, no volvieron a estar juntos.
No podía simplemente defenderme, debía derrotarlos, eran fuertes, parecían obeliscos que no se inmutaban ante el roce de mi espada, pero fue en ese preciso momento, en el que la esperanza muere y las ganas de continuar desfallecen, que decidí hacer mi último esfuerzo, dejar la vida en los campos donde la batalla hacía lugar, y quizás el terreno que jamas, ningún hombre en toda su vida volvería a pisar… Desenvainé mi espada, el resonar de ésta, al roce de su funda, despidió una luz que cegó a los grandes obeliscos, por primera vez en mucho tiempo, tenía la esperanza de ganar, entonces cerré los ojos, empuñé mi espada, y corrí decidido a dejarlo todo por ti aquel día… La batalla al fin terminó, salí victorioso, pero aún quedan secuelas de aquel momento, mi coraza fue totalmente destruida, nuestros corazones quedaron expuestos al devenir del destino, que en un principio se mostró noble y prometía grandes cosas para nosotros, pero no fue así… nuestros corazones, desde ese día, no volvieron a estar juntos.
Hoy pienso en el ayer… en todo lo que algún día fue, y solo en el recuerdo quedó, dicen que la esperanza es lo último que se pierde… pero Yo, el día que prometí dejar mi vida por ti, también hice un juramento a mí mismo, Jamás te dejaría sola, así tu vida ya no comparta destino conmigo, mi amor se quedaría contigo para siempre.
<3
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